Ni idea dónde voy pero seguime

lunes, 9 de agosto de 2010

Flequillo y botas

El título es descriptivo pero no dice todo. En este sencillo acto, quiero elucubrar una descripción generalizadora, machista, injustificada e injusta sobre las mujeres que usan flequillo y botas. Por supuesto, basada en los prejuicios masculinos no solo míos sino de la mayoría de los hombres de este bendito país. Amén. No, mejor amen. 

Primero digamos que se para para que la vean. No, no es algo obvio, no cualquier mujer se banca que la desnuden con los ojos. Sí, ya sé que algunos me dirán que no todas las que se ponen botas y flequillo buscan eso, pero no puedo atender a las salvedades. Ya dije que esto es generalizador e injusto. Así es la vida a veces. 

Saca culo. Paradita encorvada tiene la postura exactamente opuesta a la de un jubilado que hace la fila en Banco Provincia para cobrar. Como dirían los filósofos Donato y Estéfano, cóncavo y convexo. O, si prefieren algo más visual, ( vs. ).


Flequillo y botas toma cualquier cosa pero que venga en botellita. Corona, Pronto, Quilmes, no importa mucho. Para ella la bebida es un accesorio. De vez en cuando se ponen esos ponchos fashion. 

Flequillo y botas te mira hasta que la mirás. Después, te mira un poquito más, como invitándote. Y si vas, te da vuelta la cara o te dice "gracias, vine a divertirme con amigas". A flequillo y botas le gusta sentirse deseada. No come helado, bah, casi que no come y se queja porque los hombres no la toman por lo que es por dentro. 

Tiene una batalla entre su exterior y su interior. Una diferencia irreconciliable porque el interior se construye a partir de la cáscara. Es una contradicción absurda como la de las rejas del cementerio. Los de afuera no quieren entrar y los de adentro no pueden salir, ¿para qué están?

Flequillo y botas come sushi porque es "in". No sabe lo que es un Fantoche (ni el alfajor ni el payaso) y quiere tener un labrador pero no limpiar lo que cague. Está entre los 30 y 38 pero prefiere no pensar en ello. Flequillo y botas no quiere pensar.

Cada tanto conoce a algún musculosa y gel que la engatuza y se enamora de la pareja que hacen. Comparte actividades importantes como ir a Miami Sun y caminar por algún shopping. Se compran una netbook para tener algo en común y van a Café Martínez para usar el wi-fi y mirar facebooks ajenos. Comparten consumos mientras se consumen el uno al otro. 

Si la cosa no va, se separan, como cualquier persona. Y flequillo y botas se convierte porque se plantea que a lo mejor no dio importancia a las cosas importantes (?) de la vida. Es su estado de iluminación (se hace los reflejos). Cambia su look, empieza yoga y se pone a leer para ser una chica más interesante. Capaz que un día va a una plaza a tomar mate con un libro de poesía. 

Y después de horas y horas de Bridget Jones y Sex and the City, como por arte de magia, se reconoce en el espejo mientras se tapa algún granito y se da cuenta de que no puede ir contra su esencia. Paradita con su viejo jogging gris y su pulover violeta; despeinada y con 1,3 kilos de más, comprende que no puede seguir cayendo al vacío. Maduró el cambio interior y ya está preparada para ser flequillo y botas otra vez. O lo que la moda mande en ese momento.

7 comentarios:

Raquel Mancini dijo...

no entendi mucho lo que dijistes pero a mi tambien me gusta Sex and the city :P besis y muy bueno el blog!

After office kitty dijo...

nada que ver. Tipo que te reboto alguien y te quedaste con las ganas. Nada, tipo que ni ahi. No da. Suerte igual.

Unknown dijo...

una fantochada!

Br1 dijo...

¿Fantochada dulce o graciosa?

Carlitos Balá dijo...

No me siento identificado para nada. Desubicado como chupete en el culo.

budin dijo...

Indefectiblemente tengo que decirle que (por mas que ud aclare de antemano que es injusto) se equivoca redondamente.

No solo se equivoca al generalizar a todos los flequillos y botas dentro de la misma bolsa de gatos (cuac) sino que ademas ud CONFUNDE dramaticamente la estética con la HISTERIA.

Se lo dice una fequillo con botas que no se caga de hambre, toma ferneT con Coca (no light) con lo´ muchacho´ y ademas cuando corresponde se pone las zapatillas y se tira en una plaza a tomar mates (sin edulcorante porq el edulcorantes claramente es de puto).

Oia! Generalicé! :P

Vamos Sr! Mire mas allá que, como diría la genia de mi abuela: no todo lo que brilla es oro ;)

Besote!

Br1 dijo...

budín: gracias por las palabras de aliento. Presupongo que ud. es la excepción a la regla de flequillo y botas, también llamada escuadra o a veces transportador.

Coincido plenamente en que Fernet con coca light es tan absurdo y artificial como mate con edulcorante o bronceado con cama solar. Como las playas japonesas en piletas de agua salada que hacen olas. O los tomates que vende Carrefour, son bombuchas rojas.

Gracias por su mirada flequilluda al asunto.