Ni idea dónde voy pero seguime

viernes, 2 de marzo de 2012

Sos el único, pavote

Ayer hubo dos situaciones de tránsito que me descolocaron y me indignaron. Voy a enumerarlas por orden cronológico.
8:15 AM. Esquina de Jaramillo y Lugones (Saavedra). Llovía, llegué a la esquina y vi que a unos cuantos metros, por Lugones (desde mi izquierda) venía una moto. El pibe que manejaba no tenía más de 20 años. No tenía casco. Como venía lejos y yo ya estaba en la bocacalle - y además de tener paso por proximidad venía por la derecha- crucé.

Ni bien empecé a pasar vi cómo se le transfiguraba la cara. El pibe venía muy rápido, a bastante más de 40 Km/h y quiso frenar. Como la calle estaba mojada por la lluvia se le empezó a ir la moto de cola para un lado y para el otro. Pensé que se iba a caer, yo terminaba de pasar la bocacalle y lo vi, a poco menos de 3 metros, que me puteaba. Él a mí. A veces me sorprende lo rápido que viajan las motos, pero también los pensamientos. Venía rápido, sin casco, sin luz, por la izquierda, más lejos que yo de la bocacalle, y así y todo creía tener razón. Creo que no me molestó que me putee, sino que no tuviera razón en hacerlo.

La segunda fue a la noche. Cerca de las 8:30 PM en las vías de Constituyentes y Ladines (Villa Pueyrredón). Antes de la barrera si vas desde General Paz hacia Olazábal hay un semáforo. Antes de la barrera uno, y otro después. El semáforo estaba en rojo; la barrera, abierta. ¿Qué hice yo? Frené. ¿Alguien más lo hizo? No. El auto que estaba detrás de mí me tocó bocina. No sé si fuera daltónico o estaba muy apurado. Me pasó por la izquierda y, antes de cruzar un semáforo en rojo, su mujer me dijo: "¿No ves que sos el único que para acá, pavote?". Me dejó pensando.

Disculpen lo básico de mi pensamiento pero que yo sepa las leyes y normas están para ser cumplidas sin importar el número de personas que las acaten. De lo contrario viviríamos en una especie de anomia donde cada uno hace lo que quiere. Bah, creo que solo si una persona se pone por encima de las leyes deja de cumplirlas. Lo cual muchas veces implica ponerse por encima de los demás. ¿Qué pasaría si usamos esa lógica para otras leyes y normas?

Tal vez cada uno iría a la velocidad que se le antoja en la ruta, superando las máximas y sin alcanzar las mínimas. O no encendería las luces. O hablaría por celular mientras maneja porque total "es re capo y puede hacer las dos cosas a la vez".

Quizás elegiría qué impuestos pagar y cuándo. O si poner en blanco a sus empleados según cómo se haya levantado ese día. O tal vez un día se le canta robar porque sí, total otros lo hacen. Y así escalaría la gravedad con la misma excusa como argumento.

No faltarían las represalias. Si vos hacés lo que querés yo también. Y como me puteaste, me bajo y te cago a tiros. Porque yo decido qué corresponde para tu afrenta.

Qué país seríamos si pasara eso, ¿no?

4 comentarios:

Jennifer Amapola Banfrula dijo...

Apoyo tu moción. No aflojes, es fácil caer en el sálvese quien pueda.
Malvones para todos.

Br1 dijo...

Gracias, Jenny. Somos pocos pero buenos.

Nan Torto dijo...

Cualquier semejanza con la realidad es pura ¿coincidencia?.

Br1 dijo...

Desafortunadamente no.