Ni idea dónde voy pero seguime

miércoles, 14 de marzo de 2012

Fichas de dominó

Hoy pensaba que las personas somos como fichas de dominó: buscamos la coincidencia absoluta para juntarnos.

Pueden jugar con nosotros. Se puede construir algo que se derrumba en instantes. Si una se cae, empuja a las otras. Y todo el esfuerzo de derrumba hipnóticamente e inevitablemente. Y una vez comenzado es imposible detener el efecto.

En el juego, si esperás encontrar una que sea idéntica, exactamente igual a la tuya, podés dejar pasar toda la partida y no vas a hacer nada más que mirar. Porque no existe.

No hay dos iguales, pero sí muchas con las que una parte coincide. Como para mantener la unión a pesar de las diferencias.


¿A vos ya te cayó la ficha?

3 comentarios:

Anónimo dijo...

"Dominó".... mmm No se tendría que llamar, "cadena de coincidencias", "Trencito zigzagueante"

Saludos!

Anónimo dijo...

La unión aún y con la diferencia... Me encantó!! Es eso lo que permite seguir formando una cadena infinita :o)

Br1 dijo...

Gracias por los comentarios. El sentido de una cadena es diferente a un dominó.